Separador de carga en furgoneta camper: ¿mantener, modificar o quitar?

Después de meses soñando con nuestra furgoneta, por fin llegó el momento: ¡teníamos una en nuestras manos y muchas ganas de convertirla en nuestro hogar sobre ruedas!

Y como no podía ser de otra manera, lo primero fue ensuciarnos las manos para dejarla como nueva. Aquí te contamos cómo fue el arranque del proceso de camperización: limpieza a fondo y qué hicimos con el separador de carga.


🔧 Desmontando todo: adiós embellecedores

Antes de imaginar camas, cocinas o panelados, tocaba despejar el terreno. Desmontamos todos los embellecedores y monturas del interior. Si estás en este punto, ármate de paciencia y ten a mano unos buenos alicates, porque los remaches de plástico pueden dar guerra.

También retiramos la plancha de madera que cubría el suelo, cruzando los dedos por no encontrar óxido. Y sí, la tensión era real: una base oxidada puede complicar mucho el proyecto.

✨ Limpieza profunda y… ¡sorpresa!

Para nuestra alegría, el suelo estaba en un estado excelente. No tuvimos que lijar ni aplicar tratamientos antióxido. Aun así, es importante que revises cada rincón. Si hay aunque sea una manchita de óxido, ¡elimínala antes de construir encima! No te la juegues a que reaparezca cuando ya tengas muebles montados.

Le dimos una buena limpieza general, tanto a la caja como a la cabina. ¡Salió polvo para aburrir! Pero con todo reluciente, ya teníamos una base perfecta para empezar a trabajar en serio.

📐 Planificando la distribución

Con el suelo limpio y otra vez en su sitio, y empezamos a marcar con cinta de carrocero directamente sobre la madera las zonas clave: cama, cocina, almacenaje, etc.

👉 Un consejo: Usar cinta o incluso cajas de cartón para simular los volúmenes ayuda un montón a visualizar el espacio. No es lo mismo imaginar una cama que verla marcada a escala real.

🚪 Separador de carga: ¿sí o no?

Uno de los grandes debates del inicio fue qué hacer con el separador de carga. Aquí te dejamos un resumen de los pros y contras que consideramos:

✅ Ventajas de mantenerlo:

  • Seguridad: actúa como barrera en caso de frenazo o accidente.

  • Estructura: da estabilidad al conjunto.

  • Espacio útil: la parte trasera del separador se puede aprovechar para colgar cosas o como muro de apoyo para la cocina.

  • Acceso controlado: con una ventana, puedes comunicarte con la cabina sin dejar el espacio abierto.

❌ Inconvenientes de mantenerlo:

  • Resta espacio: especialmente si planeas una distribución abierta.

  • Acceso limitado: si no haces ventana, no puedes pasar de la cabina al habitáculo sin salir del vehículo.

  • Estética: rompe un poco con el look cálido que buscamos en una camper.

  • Peso: si es muy robusto, suma unos kilos innecesarios.

Nuestra decisión: modificarlo, pero sin quitarlo del todo

Al final, decidimos mantener el separador, pero con algunos retoques. Nos encajaba con la distribución que teníamos en mente, ya que nos servía como base perfecta para instalar la cocina. Además, nos daba un plus de seguridad al conducir, creando una barrera física entre la cabina y el habitáculo.

Eso sí, le abrimos una ventana. Así podíamos mantener la comunicación con la parte delantera sin necesidad de instalar un asiento giratorio, lo que nos ahorró espacio, dinero… ¡y algún que otro quebradero de cabeza! También nos da una vía de escape en caso de emergencia, que nunca está de más.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *